Necesito a alguien.
Que me mire a los ojos cuando hablo.
Que escuche mis tristezas y neurosis con paciencia
Y, aunque no me comprenda, respete mis sentimientos.
Que camine a mi lado, sin necesidad de ser convocado para
decirme las verdades que no quiero oír, aún sabiendo que
puedo odiarlo por ello.
Que no tema ser leal, simple y justo.
Que no desaparezca, si un día pierdo mis riquezas.
Que reciba con gratitud mi mano extendida
Aunque eso sea muy poco para sus necesidades
Que sea compañero en las farras y diversiones, en las guerras
y las alegrías, y que no tema las tempestades.
Que grite conmigo y que siempre ría mucho.
(anónimo)
(anónimo)
En mi largo recorrer por la vida, estoy totalmente convencida que todos, absolutamente todos, necesitamos de alguien para sentirnos vivos y acompañados en este trayecto que se llama vida.
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