Vivir en armonía y en sana convivencia con los demás, es un bálsamo para el espíritu…
Al salir de casa para dirigirnos al trabajo y abordar el automóvil, es
frecuente observar personas agobiadas y con el ceño fruncido… Parece que cargan
con un cansancio anticipado… Apenas están iniciando el día y ¡caray! les falta
ánimo para sonreír, para sobrevivir y hasta para
vivir.
Es mejor iniciar el día con buen ánimo, con un afable “buenos días” y con una actitud que genere armonía en nuestra convivencia cotidiana.
No me interesa si tuviste pesadillas, si se apagó el boiler al momento de
bañarte y te duchaste con agua fría. Quiero saber si eres capaz de reírte de ti
mismo y de la mala jugada de tu sueño. Si puedes reír a carcajadas para empezar
bien la jornada del día.
No me interesa si hiciste una gran fila de autos e interpones el tuyo con
coraje, evitando que cualquiera interfiera tu paso. Quiero saber si eres capaz
de respetar el espacio de los otros y reconocer que la amabilidad y las
prácticas cívicas, aportan una sociedad de mayor entendimiento.
No me interesa si te tropezaste y sobre ti cayeron dos transeúntes y se hizo
una carambola en la calle. Quiero saber si eres capaz de olvidarte de ti mismo
un momento, para ayudar a otros a levantarse y ofrecer apoyo a los
demás.
No me interesa si te picó una abeja y desató tu furia hasta proferir injurias
y a agredir a los demás. Quiero saber si eres capaz de controlar tu ira y tu
coraje ante las vicisitudes cotidianas y comprender que los demás, no tienen
porque sufrir por todo lo adverso que te pasa.
No me interesa si para calmar tu soledad, has adoptado a una mascota que
difícilmente sabes atender. Quiero saber si eres capaz de sacarla a pasear,
recoger sus heces y con estas acciones crear un ambiente más saludable para
todos.
No me interesa si al finalizar el día, estás cansado y ya no quieres saber
nada de los demás. Quiero saber si eres capaz de darte tiempo para ejercitar tu
cuerpo, mejorar tú ánimo y conseguir un sueño reparador y de
paz.
***Vivir en armonía y en sana convivencia con los demás,
ResponderEliminares un bálsamo para el espíritu ***