Una mujer fue al médico con un verdadero catálogo de quejas por su salud.
El médico la revisó minuciosamente, y se convenció que no tenía ninguna enfermedad.
Simplemente, sospechó que se trataba de una perspectiva negativa de la vida: su resentimiento y amargura.
Entonces, el médico llevó a su paciente hasta otra habitación del consultorio donde guardaba las medicinas.
Le mostró un mueble lleno de botellas vacías y le dijo:
- ¿Ve estas botellas? Observe que todas están vacías. Tienen distintas formas, aunque básicamente son iguales, sirven para lo mismo.
Ahora bien: puedo tomar cualquiera de ellas y llenarla con veneno, como para matar a un ser humano.
O puedo llenarlas con un remedio para quitar el dolor de cabeza, bajar la fiebre o quitar una infección.
Lo importante es que yo tome la decisión.
La elección siempre está en mi.
El doctor la miró a los ojos y le dijo:
Cada día recibimos una botella vacía.
Podemos llenarla de pensamientos que nos ayuden a afirmar los aspectos bellos de la vida y
con actitudes positivas, o con ideas destructivas.
La opción es nuestra.
Autor: Desconocido
En esta vida debemos ser conscientes y considerados con nosotros mismos y con los demás, motivo por el cual debe quedar muy claro que todo lo que hacemos o dejamos de hacer es decisión u opción nuestra, Ya es hora de saber hacer frente a nuestras responsabilidades y decisiones.
ResponderEliminar