La Lucha de Zafiro

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Soy una mujer en plenitud madre de 3 hijas adultas, 2 nietecitas y un nietecito; tranquila, gozando de todo lo que la vida me da, que todavía es mucho.....

domingo, 2 de febrero de 2014

""" Empatía """






















Se llama empatía a esa capacidad instintiva y natural de entrar en sintonía con una realidad ajena. Pero también a la habilidad de comprender los sentimientos y puntos de vista de los otros, llegando a identificarse con ellos. Al tratarse de una habilidad, se puede desarrollar y utilizar, o por el contrario descuidarla. 


 ¿Qué sucede cuando en una discusión nadie está dispuesto a ver las cosas desde el otro ángulo? 


El resultado suelen ser dos personas distantes, dolidas, incapaces de llegar a un entendimiento, atrincheradas cada una en su manera particular de ver la vida. Defenderse de este modo ayuda a sentirse más protegido y seguro, pero a cambio se pierde la ocasión de salir de un punto de vista propio para hacerse permeable a visiones distintas. 


 En algunas ocasiones escuchar es más arriesgado. Implica abrir la mente, abandonar los prejuicios o las ideas que nos definen, y eso en general asusta. A veces resulta difícil ponerse en el lugar del otro porque se interpreta como un signo de debilidad. Utilizar la empatía no sólo es más audaz y conlleva una actitud más madura, sino que también permite enriquecerse a través de otros. Cualquier persona puede desarrollar y usar la empatía. Las siguientes pautas pueden ayudar a mostrarse más abiertos a los demás: 


 • Darse tiempo: es importante tener la disposición de querer ponerse en el lugar del otro, así como dedicar un tiempo para establecer la conexión. Se debe centrar la atención en la otra persona y observarla con atención.


 • Utilizar la respiración: es uno de los instrumentos más importantes. Si queremos mostrarnos empáticos es importante relajar la respiración y no contenerla.


 • Escuchar con atención: esto requiere la presencia de todo nuestro ser, y una disposición sincera a estar con el otro. Se trata de darle un espacio y un lugar para que pueda expresarse plenamente y sentirse comprendido. 


 • Desechar prejuicios y críticas: la empatía implica una actitud receptiva. Se trata de escuchar o ver al otro sin que interfieran los prejuicios ni las ideas. Podemos abrir la mente para procurar entender su punto de vista, aunque el nuestro sea distinto. 


 • Atender a los sentimientos: somos empáticos cuando vibramos con el sentimiento de la otra persona, cuando intentamos imaginarnos cómo se puede sentir. 


 • No interferir: a veces tendemos a dar consejos o a minimizar la situación. La empatía implica acompañar en el sentimiento, estar presente. 





 Arturo Melero

1 comentario:

  1. ¿ Verdad que no es lo mismo ? Y como éste existen miles de ejemplo de cada uno de nosotros, tanto hombres como mujeres. Lo único que tenemos que hacer en cada situación es ponernos en el lugar de los demás, sin apasionamiento ni tratar de ayudar queriendo imponer nuestro criterio. Solo escuchar y comprender desde el fondo de nuestro corazón, es suficiente con esa presencia de alma con alma.

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